Aun por la noche no descanso.
Bombardeo mis propios cimientos de preguntas,
de posibles.
¿Qué podría hacer?
Si al agarrarme al abismo solo me desequilibro.
Eres esa belleza oculta que se encuentra en los paisajes,
en los rios, en las tormentas.
Eres trabalenguas.
Eres tristeza bonita,
aguileña.
Eres como los demonios que se alimentan de mi,
de los barcos a la deriva, de la sirena que flota boca arriba.
Eres la metáfora de lo inigualable.
El puerto donde desembarco cuando quiero pisar tierra firme
pero luego me sorprende con saltos y terraplenes.
Eres caída.
Eres la costra,
que no la costa.
1 comentario:
Sólo tarde
Cuando el tiempo pasó
Sólo tarde
Cuando quién fué
Se fué
Solo tarde
Cuando el amor marchó
No fué tarde
Porque tu
Tu sentimiento plasmado
En virtual tinta
¡VOLVIÓ!
Me quedé sin caramelos.
Publicar un comentario