Han vuelto las mariposas y me rozan los brazos a su paso.
Están otra vez en mi barriga,
enroscándose en mi cuello y abriendo las alas.
Están aquí las mariposas
y se enredan entre tus mechones para que me pierda en ellos.
Han vuelto las mariposas y bailan en mi estómago,
poniéndome nerviosa.
Tras tantos años al fin vuelven y las encuentro cuando me miro en el espejo.
Soy parte de ellas y se abrazan a ti para que corra en su búsqueda.
¿Lo escuchas?
Me llaman desde la cama,
para que volvamos a encajar como lo hacíamos antes.
Para volver a donde nunca debería haber llorado.
Están por todas partes y nunca había escrito algo tan bonito.
Es curioso porque por fin soy lo que buscabas,
y fue muy difícil dejarme encontrar.
No sé si me explico.
Es curioso que, una vez más, aparezcan en mis sueños,
brillando y dejando estelas plateadas por mis dedos.
Llueve y nos empapamos.
Dime que no lo notas.
Que lo pleno nos llena.
Lo lleno nos vacía para que quepamos en la habitación.
Han vuelto las mariposas y dejo que vuelen a mi alrededor.
Las encuentro cuando miro al espejo y en las fotos antiguas de mi ordenador.
1 comentario:
¡Brillante!
Me confunde entre lo que es bella imaginación o si es sacado de la realidad de su autora, difícl de acertar.
Las mariposas…
de ensueño,
de bellos colores,
de melodías francesas.
Enhorabuena.
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