Translate

18 de marzo de 2022

nada te debo y tú no me debes nada

Confieso que antes escribía para nadie.

Me imaginaba unas manos que nunca antes me habían tocado.
Me imaginaba unos ojos que jamás logré disfrutar.
Me imaginaba en los fiordos,
deseando que las copas de los árboles me mirasen para poder describir el verde que tanto ansiaba.

Confieso que antes escribía para nadie.

No te miento, antes sí lo hacía.
Pero ahora no me sirve de nada imaginarme algo que ha acabado abrazándome por las noches.

Qué casualidad.

Leo lo que escribía y me sorprende que todo lo que me pensaba que merecía
sea exactamente lo que tenga.

¿No es gracioso?

Manifesté una de esas historias bonitas con las que me gusta soñar despierta.
Está aquí, contento de volver a llenarme después de tanto vacío.

Y ahora si que no te miento. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Un texto o una confesión?
Sea lo que sea, es encantador.
Si, es possible que esas escrituras, no
fuesen para nadie, lo que es cierto, es que son más que leídas, disfrutadas… Aunque no sean para nadie, que no desaparezcan, dan vida.
Felicidades una vez más por tanta belleza escrita.